Los adultos mayores que han perdido el sentido del olfato parecen tener un riesgo más elevado de demencia, según una investigación longitudinal a largo plazo.
El estudio incluyó a 2.906 participantes de 57 a 85 años, en quienes se evaluó la capacidad de identificar cinco olores comunes. El 78% de los participantes identificó correctamente al menos cuatro de los cinco olores; un 14% identificó tres de los olores; un 5%, sólo dos; un 2%, sólo uno, y un 1% no identificó olor alguno.
Fuente: Neorlogia.com