Abril de 2021
Desde que en 1953 Watson y Crick descubrieran la estructura del ADN, el avance científico y tecnológico ha permitido conocer la secuencia exacta del genoma de cada persona y realizar una interpretación clínica que permite evitar o minimizar el desarrollo de muchas enfermedades.
En este sentido, la genómica se ha posicionado como una pieza clave en el cambio de modelo desde una medicina reactiva a una preventiva, de acuerdo con múltiples estudios que demuestran la utilidad de las pruebas genéticas en la población general como herramienta de segmentación para enfermedades comunes. Esta estrategia permite personalizar el cuidado médico de las personas con mayor riesgo, facilitándoles la oportunidad de prevención o detección temprana, tal y como destacan desde Veritas Intercontinental, empresa especializada en el campo de la genética, el diagnóstico y la biotecnología.
Fuente: Geriatricarea