El alzhéimer es una enfermedad neurodegenerativa, es decir, causada por una destrucción progresiva de las neuronas cerebrales. Una enfermedad que se corresponde con el tipo más común de demencia –supone entre un 60% y 70% de todos los casos de demencia, para un total de 30 millones de afectados en todo el planeta y más de 800.000 españoles– y que, aún a día de hoy, carece de cura. De hecho, ni siquiera hay un tratamiento capaz de frenar su progresión. De ahí la importancia, crucial, del diagnóstico precoz del alzhéimer, lo que posibilitaría una mejor atención y tratamiento de los pacientes ya desde las fases iniciales de la patología.
Fuente: ABC Salud.es